Consejos para preparar tu examen de la oposición

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¿A qué estudiante no le estresa el periodo de exámenes?

Esa época en la que normalmente uno duerme poco, come mal, está irascible, preocupado, con ansiedad… Y deseoso de quitarse de en medio la dichosa prueba de evaluación.

Y en el caso de los opositores, normalmente esta sensación dura todo el año (multiplicándose por mil cuando se acerca la fecha clave).

Por eso es crucial dedicar un poquito de tiempo y atención a tu auto-cuidado.

Imagina hacer un viaje conduciendo 72 horas, sin parar ni una sola vez a repostar gasolina, ¿que le pasará al coche?

Que no llega, se quedará seco, te dejará tirado, se quemará el motor.

Pues lo mismo te pasará a ti si no cuidas tu cuerpo (y tu mente), ese “vehículo” en el que has venido al mundo.

Así que para evitar estos problemas, vamos a ver unos consejos holísticos que puedes aplicar desde ya mismo.

 

 

Consejos psicológicos con los que prepararte para tu examen:

Te animo a que los pongas en practica no sólo los días previos al examen, sino como hábitos saludables durante tu etapa estudiantil.

 

1. DESCANSO:

Asegúrate de descansar lo suficiente, duerme unas 7-8 horas cada día (o lo que necesites en tu caso para sentirte renovado/a y alerta durante el examen).

Si puedes, échate pequeñas siestas cada día cuando te notes cansado (10-20 minutos serán suficientes, no hace falta que te llegues a quedar dormido, con estar relajado y cerrar los ojos, es suficiente para que tu sistema nervioso baje revoluciones y tu cerebro se tome un respiro).

 

2. CONFIANZA:

Mantén una actitud positiva hacia el examen y hacia tus propias capacidades. Te has esforzado mucho, has dedicado un montón de horas, recuerda que puedes hacerlo, confía en tus habilidades y en el trabajazo que ha hecho tu cerebro para retener y comprender tanta información.

Cada noche puedes hacer este sencillo ejercicio de PNL (Programación NeuroLingüística) antes de dormir: Cierra los ojos y visualízate yendo al examen tranquilo y concentrado. Observa lo que verás, escucha lo que oirás estando allí, siéntete como si estuvieras en el aula o ante el tribunal. Obsérvate desde fuera (3º posición del observador) teniendo éxito, haciendo un buen examen y saliendo de la sala con una enorme sensación de satisfacción y orgullo personal. Imagínate llamando a tus seres queridos para contarles lo bien que te ha salido, lo contento que estás. Escucha qué te dirán, cómo se alegrarán por ti. Visualízate celebrándolo y sintiéndote liberado por fin.

 

3. RELAJACIÓN:

Practica técnicas de relajación. La meditación, el yoga o la respiración profunda te van a ayudar a reducir el estrés y la ansiedad antes del examen. Puedes buscar en youtube, hay miles de recursos gratuitos y de distintos niveles; así que aunque no estés acostumbrado a practicar estas técnicas, seguro que encuentras algún vídeo que se adapte a ti.

Si no, simplemente estira tu cuerpo aguantando un ratito la postura (que tiren los músculos, que duela un poco) mientras te concentras en las sensaciones y en respirar hondo.

Cuida mucho el tiempo previo al examen, es crucial que evites ponerte más ansioso de lo que ya estarás.

Puedes ponerte música ambiental relajante a un volumen bajo.

Y si te empiezas a angustiar con pensamientos anticipatorios, enfoca tu mente en hacer operaciones matemáticas (que sean un poco complejas), dibuja mandalas, o céntrate en describir -sin juzgar- todo lo que veas delante tuyo. Son pequeños trucos para hackear tu cerebro y soltar la ansiedad.

 

 

4. PLANIFÍCATE:

Este punto es evidente si quieres llegar a tiempo con toda la materia bien estudiada y repasada para el examen… pero debo recordarte la importancia de planificar bien tu tiempo.

Crea un plan de estudio y haz una lista de tareas para ayudarte a administrar tu tiempo y reducir el estrés. Es fundamental que lo hagas por escrito, que lo tengas siempre visible y que revises cada pocos días si vas a buen ritmo, o si debes cambiar algo.

Si te has organizado bien, es muy recomendable que el día previo al examen de la oposición te lo tomes libre, o casi. Si quieres repasa un rato, pero procura dedicarte este día a ti, a tu autocuidado, a descansar, a disfrutar y premiarte por el esfuerzo titánico que has hecho todo este tiempo previo. Así irás mucho más relajado y contento al examen.

 

5. PERSPECTIVA:

Mantén la perspectiva, recuerda que un examen no define quién eres. Relativiza la importancia que tiene, no te olvides de PARA QUÉ estás queriendo aprobar, esos objetivos a largo plazo. El examen no es la meta, es el medio para lograr otras cosas y tener una vida satisfactoria. Mantén el enfoque a largo plazo.

 

6. PREVISIÓN:

El día del examen ve con tiempo de sobra, estate allí con tiempo más que suficiente para evitar contratiempos y estrés extra.

En el caso de la oposición te recomiendo que sea como mínimo una hora antes.

Si puedes, ve unos días antes a familiarizarte con la zona, el entorno (esto ayudará a tu cerebro a reducir la incertidumbre).

Mira cómo llegar, si hay parking (o dónde te podrán dejar si te lleva alguien en coche). Y ten previstas varias alternativas, por si el transporte elegido falla.

 

7. PROTÉGETE:

Seguramente los compañeros estarán de los nervios antes de entrar al examen, habrá un ambiente tenso, una energía densa en el ambiente.

Así que cuídate mucho, si puedes evita hablar con la gente (si esto es algo que te ayuda).

Y si vas a hablar, procura que sea de otros temas. O si tocáis el del examen, elige la actitud con la que te expresas y cómo dejas que te afecte la de los demás (evita negatividad, anticipaciones catastróficas, etc.)

Puedes hacer este ejercicio de protección antes de salir de casa, es súper potente.

Y en caso de que alguien diga algo que te afecte, recuerda que es SU PERCEPCIÓN personal, su vivencia, sus miedos, sus inseguridades. No dejes que calen en ti. Tu experiencia puede ser otra diferente.

 

 

Consejos de nutrición pre-examen:

No soy nutricionista y estos consejos no sustituyen los de un profesional de la salud, pero te pueden ayudar mucho.

 

1. DIETA EQUILIBRADA:

Asegúrate de comer alimentos que te aporten energía y nutrientes, para ayudarte a mantener la concentración y el enfoque durante el examen.

Incluye proteínas, grasas saludables, frutas, verduras y carbohidratos complejos en tus comidas.

Es muy recomendable tomar frutos secos, aguacate, huevo, avena integral. Puedes prepararte un porridge salado con todos estos ingredientes, que te darán energía estable y constante, sin picos glucémicos.

 

2. EVITA:

Evita alimentos procesados, refinados y azucarados.

Es muy típico creer que tomar azúcar antes del examen te dará fuerzas extra, pero no caigas en esa trampa. Pasado un rato te hará estar más cansado y desenfocado. Lo mismo pasa con las harinas refinadas y los carbohidratos simples.

Además cada vez se está investigando más sobre la microbiota intestinal y el impacto que tiene la alimentación sobre los estados depresivos y ansiógenos, la inflamación del cuerpo y las enfermedades auto-inmunes.

¡Somos lo que comemos, y en periodos de estrés debemos cuidar doblemente nuestra alimentación!

 

3. NO TE SALTES COMIDAS:

Sé que estás muy concentrado estudiando y a veces se te pasa la hora de comer, y quizás los propios nervios te cierran el estómago.

Pero de verdad, no te saltes comidas, esto sólo provocará desequilibrios en tu energía, hará que tu cuerpo entre en estado de alerta y que te sientas fatigado.

Recuerda la metáfora del coche sin gasolina que te conté al inicio del artículo 😉

Sé que a veces te estresa tener que parar para comer y que lo sientes como una pérdida de tiempo. Pero te animo a re-enfocar esta pausa como un ratito de autocuidado, un momento para tomar aire fresco, reponer fuerzas, quizás incluso para conectar con tus seres queridos y hablar de otros temas que no sean la oposición.

Así además evitas ese sentimiento de que “estás perdiendo tu vida en este proceso, y que tus relaciones se están resintiendo”.

 

 

4. HIDRÁTATE BIEN:

Bebe suficiente agua para mantenerte hidratado y alerta (entre 2 y 2’5 litros diarios). Es muy recomendable beber un buen vaso de agua nada más despertarte, para ayudar a tu cuerpo a eliminar toxinas y despertar tu sistema digestivo.

Ten siempre una botella de agua en el escritorio, y si hace falta ponte alertas en el móvil para que no se te olvide beber cada hora.

Si te cuesta beber (o no te gusta el sabor del agua simple) puedes añadirle una rodajita de pepino, de limón, naranja, unos frutos del bosque, albahaca,…

Un buen truco es congelar en una hielera lo que te apetezca, para tener preparados los cubitos y echárselos fácilmente al agua.

A mi me encanta hacerlo con zumo de piña, zumo de naranja, o bien zumo de limón con canela, cúrcuma y jengibre (que ademas son tres ingredientes antiinflamatorios y buenísimos para la salud)

Evita bebidas energéticas y no te pases con el café o el té, que te pueden poner mas nervioso aún (especialmente el día del examen). Mejor duerme lo suficiente y ve descansado, de forma orgánica.

 

5. VE AL BAÑO:

Evita el estreñimiento, cuida mucho tu salud digestiva en este periodo.

 

Y justo antes del examen, atiende con mimo a tu cuerpo, cubre sus necesidades básicas (haz pis antes de entrar, bebe agua, come unos frutos secos,…) procura estar lo mas cómodo y satisfecho posible.

Cuídalo y agradécele con amor todo lo que hace por ti, ¡sin tu cuerpo no podrías hacer todo esto que estas haciendo!

Puedes hablar (mentalmente) con él, tranquilizarle, hacerle saber que aunque es normal que esté en alerta, en verdad estás a salvo, tu seguridad no está comprometida, todo va a ir bien.

¡Confía y suelta!

 

Espero que estos consejos te ayuden mucho.

Si crees que es buena idea hacer este proceso de prepararte las oposiciones acompañado, aquí me tienes.

¡Un abrazo y mucho exito!

Ainoa